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El brasileño Neymar, quien recientemente quedó fuera de la plantilla del Al-Hilal para el resto de la temporada, ha compartido sus reflexiones sobre su tiempo en el Paris Saint-Germain. Desde su llegada a los gigantes de Arabia Saudita, solo ha podido disputar 7 partidos, lo que ha generado una serie de comentarios sobre su carrera y su relación con otros jugadores, especialmente con Kylian Mbappé y Lionel Messi.
La llegada de Messi: un cambio de dinámica
Cuando Lionel Messi se unió al PSG, se esperaba que formara parte de uno de los ataques más temibles del fútbol mundial, junto a Neymar y Mbappé. Sin embargo, la realidad fue diferente. Neymar ha revelado que la llegada de Messi alteró la dinámica del equipo y provocó tensiones entre los jugadores. En palabras del propio Neymar, la llegada del argentino generó celos en Mbappé, lo que afectó el ambiente en el vestuario.
Relaciones tensas en el vestuario
Al principio, la relación entre Mbappé y Neymar parecía sólida, pero todo cambió con la llegada de Messi. Neymar comentó: “¡Mbappé no estaba molesto! Cuando llegó Messi creo que se puso un poco celoso… Yo tenía mis cosas con él, discutimos un poco. Era un chico que fue fundamental al principio, lo llamé ‘Golden Boy’, hablé con él, jugué con él, le dije que sería uno de los mejores, siempre lo ayudé, siempre tuve conversaciones con él.”
Las palabras de Neymar sobre el ego en el fútbol
En una entrevista reciente, Neymar también habló sobre cómo el ego puede afectar el rendimiento de un equipo. “¿Qué salió mal en el PSG? Ego. Ego”, dijo. Afirmó que tener ego es positivo en cierta medida, pero que es crucial entender que el fútbol es un deporte de equipo. “Hoy si no todos ayudan es imposible ganar nada”, añadió Neymar, subrayando la importancia de la colaboración en el campo.
Un cambio de comportamiento
El brasileño continuó explicando cómo la llegada de Messi provocó un cambio en el comportamiento de Mbappé. “Cuando llegó Leo se puso un poco celoso. ¡No quería compartirme con nadie! [risas] Así comenzaron las discusiones y el cambio de comportamiento”. Esta situación no solo afectó a la relación entre los tres jugadores, sino que también tuvo repercusiones en el rendimiento del equipo en general.
Neymar y su decisión de dejar el Barça
En otro momento de la entrevista, Neymar reflexionó sobre su decisión de dejar el FC Barcelona. “No dejé el Barça para ser el mejor del mundo en el PSG”, afirmó. Recordó una conversación con Messi, quien le preguntó por qué se iba y si quería ser el mejor jugador del mundo. Neymar respondió que su decisión era personal y que había más en juego que simplemente alcanzar la cima individual.
El impacto de la presión en el rendimiento
La presión en un club como el PSG es inmensa, y Neymar lo sabe bien. La expectativa de formar un tridente letal con Messi y Mbappé generó un ambiente de alta tensión. Con el paso del tiempo, estas relaciones se volvieron más complicadas, afectando no solo su juego, sino también su felicidad en el club. “Creo que tener ego es bueno, pensar que eres el mejor… pero hay que entender que no tienes que jugar solo”, enfatizó Neymar, resaltando la necesidad de un enfoque colectivo.
Reflexiones finales de un jugador en transición
A medida que Neymar se adapta a su nueva vida en el Al-Hilal, sus experiencias en el PSG siguen siendo un tema candente. Su tiempo en el club francés ha sido un viaje lleno de altibajos, marcado por la llegada de Messi y la evolución de su relación con Mbappé. Aunque ahora se encuentra en una nueva etapa de su carrera, las lecciones aprendidas en París son invaluables.
La historia de Neymar es un recordatorio de que el fútbol no solo se trata de talento individual, sino también de cómo se gestionan las relaciones dentro del equipo. Con el tiempo, el brasileño ha demostrado que su pasión por el juego y su deseo de triunfar siguen intactos. ¿Podrá Neymar encontrar la felicidad y el éxito en su nuevo club? Solo el tiempo lo dirá, pero su legado en el fútbol sigue siendo indiscutible.
