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El Real Madrid no ha sabido aprovechar sus oportunidades de escaparse en la clasificación de La Liga en esta temporada 2024-25. Tras su derrota por dos goles a uno contra el Real Betis en la Jornada 26, la situación se torna complicada y sus aspiraciones al título empiezan a disiparse como un espejismo en el desierto.
En la jornada anterior, el equipo dirigido por Carlo Ancelotti logró una meritoria victoria por dos goles a cero frente al Girona. Sin embargo, antes de ello, los merengues se encontraron con dos empates a un gol: uno ante el Osasuna y otro en el vibrante Derby de la ciudad contra el Atlético de Madrid. Estos resultados han dejado al Madrid con 54 unidades tras 25 partidos, ocupando momentáneamente la segunda plaza en la tabla general.
La clasificación es un laberinto lleno de giros inesperados en esta carrera hacia el título. Aunque actualmente el Madrid se mantiene por encima de algunos rivales, está consciente de que todo puede cambiar rápidamente. Por ejemplo, el Atlético de Madrid está a punto de jugar su encuentro contra el Athletic Club; si logran llevarse los tres puntos, empujarán a la escuadra blanca a la tercera plaza, con 56 unidades en el mismo número de partidos disputados.
La presión en la parte alta de la tabla
Además del partido entre los Colchoneros y los Leones, la expectativa se centra también en el enfrentamiento que tendrá lugar mañana entre el fútbol Club Barcelona y la Real Sociedad. Si los catalanes obtienen la victoria, se situarían en la cima de la clasificación, sumando 57 puntos, lo que significaría un golpe considerable para las aspiraciones del conjunto madridista de recuperar la senda del triunfo en el campeonato.
Así, la presión aumenta en el vestuario merengue. En un entorno tan competitivo, cada punto cuenta y los márgenes son más estrechos que nunca. Las expectativas de sus aficionados crecen y, a medida que se despliegan las jornadas, la urgencia de resultados se convierte en un factor determinante para la plantilla de Ancelotti.
Datos que dicen más que mil palabras
Así quedaría la tabla si Barcelona y Atlético de Madrid ganan en la Jornada 26:
| Equipo | Partidos disputados | Puntos |
|———————–|———————|——–|
| Barcelona | 26 | 57 |
| Atlético de Madrid | 26 | 56 |
| Real Madrid | 26 | 54 |
Mientras tanto, la incertidumbre se cierne sobre el futuro cercano del club. La necesidad de acumular puntos se hace más palpable, y la afición está al borde del desespero. En este complicado apartado, la resolución en el campo se convierte en la única respuesta posible.
Así quedaría la tabla si Barcelona y Atlético de Madrid pierden en la Jornada 26:
| Equipo | Partidos disputados | Puntos |
|———————–|———————|——–|
| Barcelona | 26 | 54 |
| Real Madrid | 26 | 54 |
| Atlético de Madrid | 26 | 53 |
A pesar del pesimismo que se siente actualmente, la esperanza nunca se extingue en el universo madridista. Hay quienes creen que un repunte es posible, un regreso glorioso que permitiría al Real Madrid volver a situarse en el escaparate del fútbol español como el gigante que siempre ha demostrado ser.
Escenarios potenciales
Veamos posibles escenarios para esta jornada decisiva. Si el Barcelona gana y el Atlético pierde, la tabla podría quedar de la siguiente manera:
Así quedaría la tabla si Barcelona gana y Atlético de Madrid pierde en la Jornada 26:
| Equipo | Partidos disputados | Puntos |
|———————–|———————|——–|
| Barcelona | 26 | 57 |
| Real Madrid | 26 | 54 |
| Atlético de Madrid | 26 | 53 |
Por otro lado, si el Atlético se lleva la victoria y el Barcelona cae, la dinámica sería completamente diferente.
Así quedaría la tabla si Barcelona pierde y Atlético de Madrid gana en la Jornada 26:
| Equipo | Partidos disputados | Puntos |
|———————–|———————|——–|
| Atlético de Madrid | 26 | 57 |
| Barcelona | 26 | 54 |
| Real Madrid | 26 | 54 |
Las estadísticas son un terreno complejo, y el Real Madrid se encuentra en una encrucijada que podría determinar su rumbo en el campeonato. Con cada derrota, el estrés crece, pero también la resolutez de un equipo que, históricamente, ha demostrado ser capaz de sobreponerse a tempestades.
El Morbo del Clásico se adiciona a una contienda que, sin lugar a dudas, está lejos de haber terminado. La pasión por el fútbol no descansa, y en esta trayectoria, cada encuentro se siente como una final. A medida que se acerca el final de la temporada, los merengues deberán encontrar su mejor versión y mostrar al mundo que el espíritu del Madrid sigue vivo. ¿Serán capaces de levantar el vuelo cuando más lo necesitan? El tiempo lo dirá.
