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El nuevo gerente del Real Madrid, Xabi Alonso, se enfrenta a un desafío inmediato en su segundo juego al mando. Después de un decepcionante empate 1-1 en su debut, Alonso tiene mucho que reflexionar antes de enfrentarse a Pachuca, un equipo que también busca redimirse tras perder su primer encuentro contra RB Salzburg.
Una especie de debe ganar
En una competencia con solo tres juegos para cada equipo en la fase de grupos, cada resultado cuenta monumentalmente. El Real Madrid podría ser los favoritos para superar la etapa grupal, pero su empate contra Al-Hilal no ha ganado sus favores.
En vista del segundo día del juego, Los Blancos están en un punto después de su inesperado empate con Al-Hilal y se sientan detrás de RB Salzburg, quien golpeó a Pachuca con un puntaje de 2-1. Quedan dos juegos en la fase de grupos y esta noche son los hombres en la obra más simple de White of the Group Stage.
Dado que Salzburg podría darle a Los Blancos un momento difícil, tomar los tres puntos contra Pachuca es absolutamente crucial. Una victoria esta noche llevará a los Merengues a cuatro puntos y los pondrá en un buen lugar para calificar. Si también caen dos puntos, se sentarán en dos puntos y podrían arriesgarse a perder para abandonar el grupo. ¡Una gran prueba espera!
Una sorprendente re-fiesta
El Real Madrid, que se enfrenta a Pachuca en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, es una sorpresa agradable, especialmente teniendo en cuenta la forma en que se encontraron recientemente para finales del año pasado. Para que dos clubes se enfrenten una vez en un evento cruzado es bastante raro, y los dos equipos lograron tomar una cita entre ellos en diciembre pasado en la final de la Copa Intercontinental.
El evento, de hecho, se conoció inicialmente como la Copa Mundial del Club hasta que la idea de la actual competencia se programó el verano pasado. Habiendo conocido a la Copa Mundial «ex club hace unos meses, los dos equipos se encuentran una vez más en la «nueva» versión de la competencia y uno se ve obligado a preguntarse qué ha alcanzado una rara combinación de que los finalistas de la Copa Intercontinental se han sentido atraídos por el mismo grupo nuevamente.
Contrariamente a las expectativas populares, la reunión entre los dos equipos del año pasado se libró feroz y lejos de un lado, a pesar de que el Real Madrid era un favorito abrumador. El puntaje de 3-0 puede diseñar una caminata en el parque para Los Blancos durante la noche, pero la primera mitad fue tensa y el Real Madrid tuvo pocas posibilidades de jactarse. Esta noche intentarán replicar un resultado similar, incluso si serán conscientes de este momento de la amenaza que la parte mexicana puede conducir a la mesa.
¿Debería comenzar Brahim Díaz?
Para su primer juego en la oficina como el gerente del Real Madrid, Alonso decidió desplegar a Rodrygo como su ala derecha, y el brasileño regresó con una asistencia crucial para el equipo. Sin embargo, no ofreció demasiado especial y Brahim Díaz lo reemplazó más allá de la hora, mostrando una amenaza significativamente más creada por la posición.
En vista del choque de esta noche, el nuevo gerente enfrenta un dilema: ¿debería persistir con Rodrygo o darle a Brahim el comienzo contra Pachuca? Después de todo, existe una verdadera necesidad de que alguien dé un paso adelante. Vinicius Jr. ha buscado mucho tiempo, y Kylian Mbappé está destinado a perder una vez más contra la parte mexicana. El jugador que comienza bien, por lo tanto, podría ser el más importante en el último tercio.
Díaz ha hecho lo suficiente en las recientes sesiones de entrenamiento y su oportunidad a principios de esta semana de ganar la confianza del gerente ha dejado claro que el entrenador tiene en gran medida con la estrella marroquí tanto en el medio como a largo plazo. Esta noche podría ser una gran noche para el ala que quiere un descanso para el club de sus sueños durante mucho tiempo.
Reflexiones de Xabi Alonso
Si Xabi Alonso esperara una declaración de victoria de sus hombres en su primer juego a cargo como director del Real Madrid, no podría haber estado más decepcionado. El nuevo gerente, después de todo, supervisó a su equipo jugando una terrible apertura de 45 minutos, lo que llevó a un empate 1-1. Alonso tiene mucho que reflexionar antes del pitido inicial, desde su formación inicial hasta la dinámica que quiere imponer.
Lo que estará en el centro de atención, innecesario decir, es si los hombres de blanco muestran una mejora tangible de la última vez. La presión está sobre Alonso para que su equipo no solo compita, sino que también brinde un espectáculo digno de su rica historia y tradición. El Real Madrid no solo busca ganar; busca impresionar y demostrar que está listo para cualquier desafío que se presente.
Esta noche, los ojos estarán puestos en el Santiago Bernabéu, donde la afición espera ansiosa ver un rendimiento renovado. Con la pasión de los seguidores y la determinación de los jugadores, el Real Madrid tiene la oportunidad de dar un paso adelante y dejar atrás las decepciones. ¡Vamos, Madrid!
