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El Real Madrid se enfrentó a un emocionante desafío en La Liga contra el Leganés, logrando una victoria en casa por 3-2 que dejó a los aficionados al borde de sus asientos. Este triunfo es crucial para el equipo de Carlo Ancelotti, que ha regresado del descanso internacional con la necesidad de mantener la presión sobre sus rivales, especialmente con el clásico en el horizonte.
Un inicio complicado
Desde el comienzo, el encuentro no fue sencillo para los merengues. Aunque el equipo rotado de Ancelotti mostró determinación, el Leganés sorprendió a todos. Una reunión discreta cobró vida después de media hora, cuando Kylian Mbappé abrió el marcador con un penalti de Pannka, poniendo a los visitantes 1-0 al frente. Sin embargo, esa ventaja no duró mucho.
Reacción inmediata del Leganés
El Real Madrid había comenzado bien, pero en un giro inesperado, el Leganés igualó el marcador en solo 60 segundos. Diego García aprovechó un error de Lucas Vázquez, lo que dejó al estadio en un silencio incómodo. La situación se complicó aún más para el Madrid antes del descanso, cuando Dani Raba logró deslizarse entre la defensa y marcó el segundo gol para el Leganés, poniendo el marcador 2-1 en contra.
El despertar del Madrid
A pesar de estar en desventaja, el Real Madrid no se dejó amedrentar. Desde el inicio de la segunda mitad, el equipo mostró su espíritu combativo. Jude Bellingham, quien ha sido una revelación esta temporada, se hizo presente y logró empatar el partido, manteniendo vivas las esperanzas de los aficionados. La presión sobre la defensa del Leganés aumentó, y Ancelotti no dudó en realizar cambios estratégicos.
Los cambios que marcaron la diferencia
Con el tiempo corriendo y la necesidad de un gol, Ancelotti decidió hacer cambios clave. Introdujo a Vinicius Junior, Rodrygo y Fede Valverde, quienes habían estado descansando tras largos viajes. Esta decisión demostró ser acertada, ya que amplió la presión sobre la línea de fondo del Leganés y permitió al Madrid recuperar el control del juego.
El gol de la victoria
El momento decisivo llegó cuando Mbappé, en una jugada mágica, lanzó un tiro libre a Fran García. Con una precisión impresionante, logró marcar un gol que selló la victoria para el Madrid, dejando el marcador en 3-2. Este fue el gol número 33 de Mbappé en su primera temporada con el club, igualando el récord de la primera temporada de Cristiano Ronaldo en el Madrid en 2009/10. Solo Ivan Zamarano se encuentra por delante de él en la lista de goleadores en su primera campaña.
Un camino hacia el futuro
El Real Madrid no ha perdido un juego de campeonato desde octubre, y este triunfo refuerza su posición en la liga. Con el clásico a la vista, el equipo debe mantener el ritmo y la concentración. Sin embargo, no hay tiempo para relajarse, ya que el próximo desafío es una segunda etapa de la semifinal de la Copa del Rey contra la Real Sociedad el 1 de abril. La afición espera que el equipo mantenga este nivel de juego y continúe luchando por los títulos.
La victoria sobre el Leganés no solo es un reflejo del talento individual de jugadores como Mbappé, sino también del trabajo en equipo y la estrategia de Ancelotti. El Real Madrid sigue demostrando que, a pesar de las adversidades, siempre encuentra la manera de salir adelante. Con el apoyo incondicional de su afición, el club merengue se prepara para enfrentar los próximos retos con la misma determinación y pasión que los ha caracterizado a lo largo de su historia.
